Cuando era niña, me encantaban las películas de indios y vaqueros. Si nuevamente las pusieran en cartelera, yo sería la primera en acudir al cine para verlas. Mi madre les compraba a mis hermanos caballitos, indios y vaqueros de juguete, incluso hasta una carreta, con ruedas grandes, igual como en las películas.
Yo me ponía feliz al ver jugar a mis hermanos con tan bonitos juguetes, para mí lo eran y para ellos, ya se imaginan. Al final todos jugábamos a la guerrita y nos divertíamos mucho. Pero en una de tantas de aquellas películas, me gustó la historia de los indios Cherokee y se las voy a contar porque al final de la historia, les compartiré un bonito mensaje.
Pues bien, los indios Cherokke tienen un ritual donde los niños pasan a ser hombres. Cuando el niño empieza su adolescencia, su padre lo lleva al bosque, le venda los ojos y se va dejándolo solo.
El niño tiene la obligación de sentarse en un tronco toda la noche, y no puede quitarse la venda hasta que los rayos del Sol brillen de nuevo en la mañana.
El niño está aterrorizado, puede oír el viento soplar, la hierba crujir. Sentado estoicamente en el tronco sin quitarse la venda, ya que es la única manera en que puede llegar a ser hombre.
*Estoicamente: Fortaleza y dominio de sí mismo.
Después de esa horrible noche, aparece el sol y el niño se quita la venda. Es entonces cuando descubre a su padre sentado junto a él.
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Su padre no se ha ido, estuvo ahí toda la noche, siempre a su lado, protegiéndole del peligro sin que se diera cuenta.
* De la misma manera, es nuestro padre celestial con nosotros, y quizá muchos no crean en él... Pero aún cuando no podamos verlo, nuestro padre está a nuestro lado, velando por nosotros.
Por favor no te desanimes, sigamos para adelante. Aunque a veces parezca que no hay otra salida. Ora con todo tu corazón y verás que él nos escucha.
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Les dejo un abrazo y espero les haya gustado esta historia.
Cuídense mucho! 😉🌷🇵🇪
Cuídense mucho! 😉🌷🇵🇪
Nuria Ruesta Zapata.
Hora: 12:28 a.m.
La leyenda de ese rito es precioso. No se le deja solo, sino que se le hace pensar que lo está, para que sepa lo que es defenderse por sí mismo.
ResponderEliminarUn bonito ritual, sin duda. Un abrazo y por la fe, sea a lo que sea.
Gracias Albada. Qué lindo te haya gustado.
EliminarUn abrazo. 🌷😘
Hola Nury.. Paso a saludarte y agradecerte tu participación en mi Blog.
ResponderEliminarMe ha parecido muy interesante tu reflexión de hoy, "Que la fuerza nos acompañe" por dejar una frase muy cinematográfica..
Un abrazo..
Llorenc, gracias también a ti por tu presencia. Eres siempre bienvenido.
EliminarEsa fuerza está en cada uno de nosotros. Vamos, vamos para adelante!
Un abrazo. 😉
Buena historia real. Si quieres seguir viendo westerns, pincha aquí: https://www.facebook.com/groups/885875708216887/
ResponderEliminarHola Yanka, muchas gracias por compartir el link de los westerns.
EliminarCuídate. 😉
HIJO, ¿QUÉ TE HAN HECHO?
ResponderEliminarVUELVE A TUS RAÍCES
Esta es la historia verdadera de un indiecito purépecha cuyo nombre espiritual lakota sioux actual es "Kiya-Wabli" que significa "Águila-Volando", nacido en Pátzcuaro (que significa Puerta del Cielo o Lugar de la alegría) en el estado mexicano de Michoacán.
Siendo un muchacho maravillado por la vida de los gringos se fue a Estados Unidos para vivir su sueño americano...
Al cumplir la edad requerida ingresa en el ejercito estadounidense para poder así conseguir la nacionalidad americana, y con el grado de sargento es enviado a la guerra de Vietnam.
Poco a poco su sueño se va transformando en una realidad pesadillezca. Para escapar del horror se evade con todo tipo de drogas y alcohol. La guerra hace destrozos en su alma y en su espíritu, y resulta herido por la espalda. A su regreso a América es mal recibido con todo tipo de insultos por el propio pueblo americano. Esta mala acogida lo trastorna perdiendo la razón y las ganas de vivir deambulando y mendigando por las calles de la gran selva urbana.
Una noche de las tantas que había pasado sentado al lado de un farol pidiendo limosna andrajosamente y totalmente lerdo con la cabeza totalmente inclinada hacia su pecho, se le acercó un señor. Él sólo percibió que llevaba unas sandalias franciscanas y logra escucharle a la tercera vez:
- Hijo, ¿qué te han hecho...? Hijo...
Esas tiernas palabras le sacuden y empieza a hablar de todo lo que le había pasado desde que se fue de su tierra natal y de infancia, sus dolores, sus horrores, sus fracasos, sus heridas, sus desengaños, sus guerras, sus muertes...
En eso, levantó su mirada antes perdida hacía su preocupado locutor anónimo. Y se percata de que era un religioso por el alzacuellos.
Éste le vuelve a hablar tocándole la mano con calidez:
- Vuelve a tus raíces, hijo. Vuelve... Tú puedes, podemos...
Mientras ve que el hombre se va alejándose, empieza a recordar su infancia, su familia, su abuela, su gente, su tierra. Y súbitamente, se levanta y emprende el camino de regreso.
Después de algún tiempo, llega a su pueblecito, a la casa de su abuelita, pero, ésta no se sorprende al verle ya que los sueños le habían dicho de su vuelta. Y le abraza con gran alegría...
La abuela pertenecía al consejo de ancianas y era una mujer medicina.
-Hijito, tú también tienes el don del Gran Espíritu de ser hombre medicina para ayudar al pueblo. Ahora necesitas descansar y sanar de todas tus heridas... Y encontrar el centro.
A partir de su purificación espiritual se convirtió en un hombre medicina llevando la danza de la Paz por todo el mundo y haciendo mucho bien por todos las personas que pudo ayudar. Y un gran defensor de los derechos indígenas.
Un hombre que sufrió y combatió en la guerra se transformó en hombre de paz...
¡Waho!
Woooow, qué hermosa historia! Qué lindo que un ser humano a partir de su purificación espiritual se convierta en un hombre de medicina y lleve paz a todo el mundo. PAZ que tanta falta nos hace.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo Yanka.
Cuídate mucho.
En alguna película he visto ese ritual pero no se me ha ocurrido traerla a nuestra fe, una fe que tiene la capacidad de mover la mano de Dios cuando la nuestra se queda sin fuerzas. Abrazos
ResponderEliminarQué lindas palabras Ester. Gracias por tu presencia hoy.
EliminarTe dejo un fuerte abrazo.
Cuídate mucho.😉🌷
Nury, en el pueblo donde vivo tenemos la fortuna de que aún existen los indios viviendo aquí... tienen tierras muy lindas y sus casas de invierno y primavera, se llaman Indios Kikapoo
ResponderEliminarte mando un abrazo grande
Hola Susy, qué lindo saberlo. Espero el gobierno siempre los apoye.
EliminarGracias por tu comentario.
Un fuerte abrazo para ti.
Cuídate mucho.😘🌷
Bonita historia y bonito ritual. A más de uno y una les haría falta una noche de esas.
ResponderEliminarAbrazos.
Estoy de acuerdo contigo. Jijiji.
EliminarGracias por venir.
Un abrazo.
😉
Los Indios, como toda etnia que comparte la naturaleza, eran muy sabios.
ResponderEliminarMuy Bonita la historia
Besitos!
Así es, una etnia maravillosa. Me alegra saber que todavía existen algunas tribus como los indios Kikapoo, cómo me indica en su visita Susy líneas arriba.
EliminarMe alegra te haya gustado la historia.
Gracias por venir. Eres siempre bienvenido.
Un abrazo. 😉
Estas costumbres y tradiciones nunca se deberían cortar. Son las que en realidad nos hacen aprender lo que hay que realizar en nuestro presente y de hecho gracias a ellas el ser humano podría vivir mejor y no abandonarlos a un pasado lleno hojas secas.
ResponderEliminarAbrazos y gracias por visitar mi blog.
Hola Joaquín bienvenido. Gracias por tu presencia en mi blog, un aporte bastante importante el tuyo y con el que estoy de acuerdo. Tantas cosas para aprender y que muchas veces no les damos la importancia que merece.
EliminarUn abrazo.
😉
Hola, Nuri. Me ha encantado tu historia de indios, como también la forma tan primorosa de hilvanarla con la de Nuestro Padre celestial.
ResponderEliminarMuy bonita entrada.
Un fuerte abrazo y cuidaros mucho.
PD. No se como ni cuando perdí tu pista, pero soy seguidor tuyo, desde hace bastantes años. Acabo de comprobarlo y sigue ahí mi antiguo icono.
También quiero decirte, que como me es imposible, por falta de tiempo seguir el ritmo de tus publicaciones, cada vez que pueda y venga a ti procuraré hacer los deberes pendientes, como acabo de hacer ahora mismo. Por cierto me ha parecido muy interesante, ese servicio informativo que ofreces como abogada.
Gracias Manuel, qué gusto saber de ti. Cuídate mucho y pierde cuidado, mi casita siempre estará abierta para ti.
EliminarCuídate mucho.
Un abrazo.
😉
Desconocía esta tradición, me ha encantado, Nury. Y el mensaje final lo dice todo, la confianza ciega.
ResponderEliminarMil besitos para ti ♥
Gracias Aurora, qué lindo te haya gustado. Sigamos para Adela te y no perdamos la fe.
EliminarUn abrazo. 🌷😉
NURY
ResponderEliminarQue bonita historia, si analizas en profundidad, te topas directamente con una esencia de vida pura y neutra, desde el punto inicial de supervivencia, donde hace al Hombre, dueño temporariamente de ese espacio de tiempo, que el Creador, nos destinó.
Lección de Oro, mi querida amiga, gracias por exponerla.
Mi besito para ti.
LÚCAS
Hermosa apreciación Lúcas. Gracias por tu cálida visita.
EliminarUn abrazo. 🌷
¿Buenas tardes todo bien? Soy brasileño y estoy buscando nuevos seguidores para mi blog. Yo también puedo seguirte. https://viagenspelobrasilerio.blogspot.com/?m=1
ResponderEliminarSi me sigues, envía el enlace a mi blog y te seguiré de vuelta.
Gracias por la visita.
EliminarSaludos.
Amiga mia,lo tuyo es la pluma,creo que es tu verdadera vocación
ResponderEliminarGracias Juan!
EliminarUn abrazo. 😉
Hola mi querida Nuri, fijate no habia oido esa historia nunca, pero es hermosa, mas el mensaje que lleva, tienes toda la razon nuestro Padre hace lo mismo con nosotros, mirándonos desde lo alto, que no perdamos la fe y saldremos todos juntos, me agrado muchísimo, por el mensaje que lleva, gracias por contárnoslo, te cuidas siii.
ResponderEliminarBesitos dulces
Siby
Gracias Siby por tus lindas palabras
EliminarMe alegra te haya gustado el mensaje de la historia.
Un fuerte abrazo.
Cuídate mucho. 🌷😘
Me ha encantado esta historia de la cual algo sabia, los indios, al igual que los budas, nos hacen sentir su sabiduría al igual que esa fe ciega.
ResponderEliminarAbrazos cariñosos para tu noche.
Qué lindo Ani! Vamos para adelante.
EliminarUn fuerte abrazo.
Cuídate! 🌷😘
De niña también adoraba las películas de indios y vaqueros, ¡qué tiempos aquello!
ResponderEliminarLas miraba junto a mi abuelo que se las conocía todas.
Me encantó este post Nury, besazos al alma.
Wooow qué lindo Paula y sobretodo hayas compartido bonitos momentos con tu abuelito.
EliminarUn fuerte abrazo.
Cuídate. 🌷😘
Nury Que bonita leyenda de indios que bonito escribes.
ResponderEliminarUn beso enorme.
Hola María, qué gusto verte por aquí. Gracias por tu lindo comentario.
EliminarUn fuerte abrazo y cuídate mucho.
🌷😘
Muy bonita la historia.Creo que lo leí alguna vez,pero me alegro de que la hayas recordado porque así lo saboreo otra vez.
ResponderEliminarY yo sé que el PADRE no abandona a SU hijo
Besucos y bendiciones
Gó
Gracias Gó. Me alegra haberte hecho recordar nuevamente la historia y más, que tengas a Dios en tu corazón bonito.
ResponderEliminarCuídate mucho. 🌷😘
Hermosa reflexión te mando un beso
ResponderEliminarGracias amiga.
EliminarUn fuerte abrazo también.
😘🌷
Es una historia muy bonita, así es como se hace hombre un indio cherokke, la recuerdo porque mi padre siempre decía eso a mis hermanos. Saludos.
ResponderEliminarHola Sandra,gracias por tu lindo comentario. Me alegra que tu papito les haya contado la historia a tus hermanos y por ende a ti también. También la podemos compartir con nuestros hijos.
EliminarUn fuerte abrazo.
Cuídate mucho.