QUISIERA SER UNA AVE

Estaba cambiando lo canales del televisor y en uno de ellos observé, el vuelo de muchas aves por el celeste cielo, de pronto mi deseo fue, ser una ave más en ese vuelo, y poder emigrar lejos, a donde nadie me pueda alcanzar y poder descansar de la rutina, de los temores, del cansancio, de hacer las tareas todos los días, de pagar las cuentas, y de poder disfrutar de una linda lectura, sin el menor ruido. Y me imaginé, en lo más alto de un frondoso árbol, escribiendo mis notas. Pero...oh sorpresa, el grito de mi hija de 3 añitos, me volvió a la realidad, …-¡¡¡mamáaáááá quiero mis dibujos!!!-, parecía que mis tímpanos iban a estallar y sentí que todo mi talento para escribir, se vería frustrado; ya que la única hora que tengo disponible para hacerlo, es cuando todos  mis hijos están durmiendo. De pronto me dije: ¡Es una locura!...¡Inténtalo de nuevo!, respiro hondo y profundo y aquí estoy, a la carga otra vez. Ser madre, es la tarea más ardua y sacrificada que puede haber. Cuando era pequeña, mi mamá siempre lo repetía: ¡Sólo cuando seas madre, podrás entenderme!...y hoy, siendo madre de 3 hijos y con edades diferentes, le doy toda la razón. Pero después de toda esta pequeña reflexión, me doy cuenta, que aún estando en la cima más alta, de aquel árbol frondoso, jamás los abandonaría. Dejaría mis notitas colgaditas en una de sus tantas ramas, y regresaría por ellos, esté donde esté, para darles siempre, todo mi amor, mi cariño y lo más importante, los llevaría a volar conmigo a un mundo donde no exista el odio, a un mundo dónde sólo exista el amor y la unidad de la familia, siempre los protegería, porque sólo una madre sabe dar tanto sin esperar nada. Bendiciones!!!